Crearnos en sociedad (I) Introducción
Decidí empezar con esta serie porque en los últimos meses, tras haber acabado PNI, que me han supuesto dos años sin parar de estudiar, 3-4 noches en semana, escribiendo, procesando todo el contenido que me han dado, relacionándolo con lo que ya tenía, pero a la vez, sin parar de trabajar, ni de ver pacientes… ahora me veo con un poco de tiempo y con libertad para relacionar todo este nuevo conocimiento, pero en una segunda leída, sin ningún tipo de presión y empiezan a aposentarse los conceptos. Me siento a escribir cosas propias, a ir vomitando ideas, en forma de guion para el podcast, el resultado es que tuve una pequeña catarsis o epifanía con el tema social, que es lo que os voy a exponer en esta serie de capítulos.
Ya os hablé en el capítulo 4 y 5 de lo emocional y de lo mental, pues bien, dándole muchas vueltas, en la base, en la construcción de nuestras reacciones emocionales, algunas de ellas, y de nuestro procesado mental está toda la interacción social. Esto, dicho así cuesta y me ha costado siempre. Se oye mucho hablar del modelo bio psico social, algo de lo que hablaré en esta serie, pero seguro que a muchos os pasa, a que se refiere la parte social concretamente???
Cuando hablamos de la sociedad, de las relaciones entre lo social y la salud … no sé, se dice que somos seres ultrasociables, que el desarrollo del ser humano y la hegemonía humana, es por nuestra capacidad colaborativa, más que por nuestras posibilidades a nivel individual, que no somos los más fuertes, ni los más resistentes, y que nuestro desarrollo cerebral se debe en parte a está necesidad social. Razón no falta en eso. También se habla de como el encajar en la sociedad o cómo el ser apartado de la ella afecta al individuo. Vamos un poco más allá, pero creo que no acabamos de entender la importancia que tiene este componente social… para que os hagáis a la idea, cualquiera de nosotros puede ser incapaz de reconocer sus emociones, ni de dejárse ir y expresarlas, por un acuerdo social. Os suena la frase “los niños no lloran”, pues bien, yo no lloro abiertamente desde hace 14 años. En los últimos me he abierto un poco y he cambiado algunas cosas, pero salvo excepciones no lloro nunca… y motivos he tenido, como todos.
Como este ejemplo otros muchos, Muchas personas somos capaces de dejar de hacer cosas que haríamos por nuestras cadenas sociales, por aquellas normas que nos ha impuesto para formar parte de una familia, de un grupo social, de una religión, cadenas y normas, que seguramente tienen una razón de ser y la propuesta no es romper con todo, pero si tienes un problema de salud y no consigues salir de él… o si quieres mejorar algo, empezar a moverte, empezar a comer bien y no puedes… ve a buscar ahí, ve a mirar con algún profesional que vacío, que problema no has solucionado, que es lo que no dejas que salga, que estás tapando y cual es el programa que se codificó en su día, que te está amargando la vida.
Al tratar el tema de la salud, desde el vitalismo, de como hemos de potenciar las capacidades que tiene el cuerpo para autorregularse, siempre os hablo del sueño, de la alimentación, la hidratación, el ejercicio, la gestión del estrés, las emociones y los pensamientos, pero la parte social, el componente social, pese a que se le da importancia creo que es algo que no llego a trabajar; e incluso te diría que hasta hace unos meses ni me lo planteaba. Sin duda me formaré y leeré en lo próximos años en esta dirección, pero a día de hoy es algo en lo que me cuesta entrar.
Es más no tenía disociado que la forma de influir sobre las emociones y la actividad mental está condicionada debido a este factor social, no diferenciaba el cómo las relaciones, los sacrificios, las renuncias, las cosas que nos vemos obligados a hacer, el cómo nos han tratado o cuidado, el haber tenido padres de una forma y otra… todo esto es fuente de conflicto emocional, mental y físico. Físico también, un niño triste, tímido, muy posiblemente nos lo encontremos con un aumento de cifosis dorsal y/o con una rotación interna de caderas, es decir con las rodilla mirando hacia dentro.
Además, como sanitario la sociedad y como el individuo se relaciona con ella es algo que en principio se me escapa y lo que es seguro es que nadie, nunca en mi formación académica me ha hablado de ello, o le ha dado la menor importancia. De la parte emocional, mental, algo hablamos, pero de las relaciones sociales y su importancia y repercusión en la salud, hay que buscar muy fuera del mainstream, por así decirlo. Casi nunca me dedico a definiros las cosas, simplemente hilo cosas dando por hecho que todo se entiende, pero me voy a entretener en definir un poco algunos términos. La RAE define sociedad de 4 maneras
- Conjunto de personas, pueblos o naciones que conviven bajo normas comunes.
- Agrupación natural o pactada de personas, organizada para cooperar en la consecución de determinados fines.
- Agrupación natural de algunos animales.
- Agrupación comercial de carácter legal que cuenta con un capital inicial formado con las aportaciones de sus miembros.
Es decir conjunto de personas, normas comunes, un mismo fin, pactos, cooperación. Todo esto conlleva relaciones, jerarquías, desigualdades, posibles conflictos y una serie de normas, escritas y no escritas que pueden chocar directamente con la realidad individual. Incluso un individuo puede sacrificarse por el grupo, en casos no comunes, que solemos ver en el cine y en situaciones llevadas al extremo pasa. Si lo miramos desde un punto de vista individualista, que norma va a generar que yo me sacrifique por otras personas, lo primero en mi lista de prioridades, lo primero para lo que estoy programado es para sobrevivir yo, ¿No? pues posiblemente no, a lo mejor estás programado para que sobreviva la especie.
y volviendo a la realidad cuotidiana, no os encontráis personas que sacrifican su salud, su bienestar por la obligación de cuidar de alguien, incluso hasta límites extremos… ¿qué motiva esto? esa es mi pregunta y ahí es donde se abre una fuente de estudio para aquellos casos en los que no conseguimos llegar a cambiar cosas o que no salimos adelante.
Seguiré entrando en profundidad en este tema y he preparado una serie de capítulos en los que voy a tratar varios … esto lo ampliamos cuando ya estén escritos
Me dejo cosas, pero no me alargo más.
Un placer y hasta siempre.